domingo, noviembre 30, 2008

Dolor emocional ( y III)

El aprendizaje suele ser un proceso de Montecarlo. Se excita el sistema mediante entradas aleatorias y se modifica su función de transferencia para intentar maximizar la respuesta deseada. A dicha respuesta se le suele llamar función de coste, no es un nombre que me guste demasiado, pero es el que tiene.
Los niños aprenden de esta manera a manejar sus brazos: el movimiento de brazos de los bebés tiende a ser browniano, barriendo una amplia zona de su alrededor. Cuando por azar toca algo, se van perfilando las redes neuronales que con posterioridad le permitirán encaminar sus manos a los objetos que quieran tocar sin necesidad de ser conscientes de cada movimiento.
Una relación amorosa es un proceso de aprendizaje cuya función de coste es la ternura. Uno no está seguro de lo que hace, ni por qué lo hace, pero debe estar muy atento a cómo evoluciona la ternura, si crece o si decrece, y debe dejarse moldear por la respuesta. Y debe procurar abandonar sus prejuicios, sus ideas preconcebidas, así surge la sorpresa de la simbiosis, del crecimiento. Amar debiera ser un proceso de aprendizaje. Eso deberíamos aprenderlo.


En desamparo

Sostengo las lágrimas con alambres
en un giro de esquina inesperado
porque el mundo gira
en un momento
y la risa transmuta pronto en llanto.

Reír de lo que duele
hace daño.
Mucho más que llorar
en desamparo.



Anidación

Hay una realidad que persiste
más allá de toda incontinencia
más allá de toda escama de lagarto,
más allá de alguna duda.
Hay en cada esquina
una salida
si giras a la izquierda sin demora
y, si es preciso,
según renazco y tú te anidas.



      Onda, Hector Zazou (canción corsa)

viernes, noviembre 28, 2008

Dolor emocional (II)

Digan lo que digan, es fácil reconocer una equivocación. Y hasta es fácil prerreconocerla.
Cuando se pasan los efectos hilarantes del hachís y del alcohol sólo queda turbiedad, el buen bebedor debe despedirse y debe hacerlo sin diplomacia (para algo llegó la turbiedad). Porque la turbiedad facilita la no equivocación, porque la turbiedad despeja al entendimiento del cielo protector de lo conveniente: lo que un borracho sabe que desea puede resultarle superfluo cuando deja de estarlo (borracho).

Y cuando deja de estarlo, se convierte en alguien parecido a ti. Pero parecido a ti ahora que tienes tiempo, y que buscas conversación en estas palabras o, tal vez, algún tipo de iluminación, o de redención. Pero no te equivoques, el Sahara sigue siendo un desierto y tú (o sea yo), apenas llegas a ser un grano de arena.

Arrastrado por la corriente de los días, uno puede abandonarse, o puede escribir todo esto que llegan a leer los granos de arena, o puede esperar a una racha de viento que venza a la cresta de la duna y lo transforme.

Pero en el preciso momento en el que uno abandona la diplomacia, tú te quedas fuera, quedas en el la frágil geometría de un caleidoscopio o en las garras de astracán de la supervivencia.



Caleidoscopio

Hoy ha sido una noche productiva
en incestos, en astrolabios:
entreabiertas las estrellas
me miran con furor de orgasmo.
En un rincón perdido
entre tus dientes
astilla soy de espejo.

Inconsecuente.


Astracán

Reflejo la luz como una esponja.
El agua la retengo como espejo.
Sístole de un latido ciego
y, ciego, observo los reflejos.

Astracán sin garras
muerto sin duelo,
la maldición nunca fue excusa
como tampoco lo es decir “no puedo”.
Deja que te bese
como se abre a un cuerpo.

Dolor emocional (I)

Anoche estuve dolido emocionalmente en una mezcla cambiante de cabreo, ensoñación, ironía y cinismo. Supongo que el motivo era esa sensación que me llevó a escribir "De añicos y mesotes", esa percepción difusa de que algo se había roto en mí.

Por eso actué compulsivamente, incluso con fiereza interna, intentando lograr un desasimiento que no alcancé. El desasimiento tiene sus reglas y una de ellas es que no suele llegar cuando se busca perentoriamente. Requiere de disciplina y elaboración y ésas son incompatibles con la ebriedad.

Por el contrario, los poemas sí llegaron, porque conseguí extender algunas de las emociones que padecía sobre la barra del bar, conseguí definir su color con las palabras, también su tacto y, en algunas, incluso su sabor. En menos de diez minutos escribí tres poemas en mi cuadernillo negro, en un acto de sinestesia y depredación. Salieron de corrido y cuando acababa uno, notaba que faltaba parte del cuadro, que aún no había conseguido el encaje que andaba buscando. Más tarde escribí otros dos.

Son poemas intimistas, producto de múltiples monólogos interiores, y puede que al lector le sean indiferentes, eso no lo sé.

Los publicaré por orden temporal, tal y como salieron en esos momentos, sin correcciones. Éste nunca ha sido un blog literario.

Golpe de humo


Abandoné la razón
para ser ligero,
para disgregarme como humo
frente al golpe,
para esquivar la caricia,
el beso,
hasta la risa,
y ser nada en ceniza,
como el que huye.

jueves, noviembre 27, 2008

La poesía y su versatilidad

Mi amigo estaba intentado ligar con un par de francesas, sin demasiada fortuna. En un momento dado se me acerca y me dice:

- Anda, Carz, compón un poema en francés.
- !Joder, que hace mucho que no hablo en francés....!
- No seas capullo.
-¡Pero que no me acuerdo!
- No seas capullo.

Dans une chambre

Dans une chambre
nous sommes rêvés
pour écouter et pour rire.

Dans une chambre
nous avons de naître
pendant par la fenêtre
la vie roule très doucement.

Dans une chambre
nous avons de vivre
pendant quelques minutes
et faire de la vie toute petite
et, surtout, charmante.



Se lo llevó. Bueno, dijeron que había incorrecciones, pero que se entendía y era un poema "très joli".
Los dejé en la puerta de su casa. Creo que ha sido el poema más útil que he escrito nunca.

De añicos y mesotes

Algo se ha roto
aunque no debiera,
se quedó el sol sin primavera
y la nieve sin color.

Algo se ha roto,
como rompe el agua en la cascada,
pero sin espuma y sin sonido
y con arcoíris sin calor.

Algo se ha roto,
como obscura sinestesia,
antesala de siniestras estrategias
y de hoguera sin olor.

Algo se ha roto,
aunque perduro,
como roca embalsada en su basalto,
como nana que llora sin chiquillo,
como acantilado sin fragor.

miércoles, noviembre 26, 2008

Sigo cerrando bares y con mis excesos. Y pago al contado.

- Anda, ponte el vestido negro y vamos a bailar.
- ¿El cortito?
- Claro, que hay muchos portales oscuros por el camino.


      Con dos camas vacía,   Sabina & María Jimenez

Beso kafkiano

Hoy me han diagnosticado
un cáncer de leopardo,
un enfisema de ciervo
y tres cálculos tigrales.

Un linfoma de pantera,
un ictus de guepardo,
seis eritemas de zorro
y un esguince de ballena.

¿Y todo eso por besarla?

No, eso sólo por pensarlo.


Jo, lo intenté, pero no me dormía :-(

martes, noviembre 25, 2008

El adiós y los paisajes

El viento se serena sobre la arboleda. Las dunas están tranquilas, dormitan como ballenas petrificadas convertidas en polvo, pero yo no lo estoy. No consigo impregnarme de esta calma, de este firmamento henchido de estrellas. Frente a la innegable hermosura de este paisaje prevalece en mí un dolor difuso y terco, es la reacción alérgica a la pérdida, es la expulsión del olvido cristalizado, pero sin sangre, casi aséptica.
No es nuevo, pero será distinto, porque siempre son distintos los adioses, esas vueltas de tuerca que nos estrechan el carácter, porque no lo forjan, sólo lo aprisionan, deformándolo. No es nuevo, pero eso apenas ayuda a metabolizarlo. No es nuevo, pero tampoco será el último, porque tengo una especial habilidad para atraer a las mujeres cactus. Será que tengo alma de desierto.


      Halfaouine,   Anuar Brahem

lunes, noviembre 24, 2008

Ginebra

Sólo floreces al decaer,
sólo renaces cuando se va el sol,
y en estas noches libres de carmín
miras tu espejo, pero no te ves.

Sabes que olvidar siempre ha sido igual,
sabes que recordar sólo es causa de dolor,
pero siempre vuelves a recaer.

En tu mirada habita una flor,
en tus ojos remansa un humedal,
en tu sonrisa crece un jazmín,
en tu cintura se estrecha tu calor:
siempre vives lejos de donde estás.

Sólo hay que aprender a perder y amar.
Sólo hay que aprender a amar y perder.
Sólo has de iluminar
esta noche perdida entre ginebra.

Mañana el sol secará todas las lágrimas
y dejará la sal.
Mientras,
tus manos se olvidan del tacto,
tus labios se secan contra el mar.

Sólo hay que aprender a amar y perder.
Sólo hay que aprender a perder y amar.
Sólo has de iluminar
esta noche perdida entre ginebra.


      Qaf,   Anuar Brahem

sábado, noviembre 22, 2008

Abrazada

Abrazada, escuchaba tus suspiros
mientras posaba mi mano en tu nuca
como quien sujeta a un sueño.

Abrazada, me diste las gracias
con una espontaneidad que se me infiltró
como las raíces absorben el agua.

Abrazada, quedó un eco de fondo,
una aroma con cuerpo,
un sabor que traspasa la boca
y se va a plomo hasta el estómago
y lo llena de aire
y lo vuelve ligero.

Abrazada, me diste las gracias,
me hiciste más bello.


      She's Like a Swallow, Hector Zazou (canta Jane Siberry)

viernes, noviembre 21, 2008

Un poema en diez palabras mientras un sol sanguíneo apenas se perfila sobre el puerto y todos los rincones incitan a abrazarte

Suave.

jueves, noviembre 20, 2008

Perico el oso

Mi abuela me contaba cuentos: Arrancapinos y Rompemontañas. También los clásicos.
Mi abuela era una mujer fuerte y ruda, pero, si aprendías a leer entre sus gestos, era de una gran dulzura. Mi abuela me llamó en su lecho de muerte, cuando apenas era más que un deshecho de sí misma, cuando hacía meses que el practicante enseñó a mi padre a ponerle inyecciones de morfina. Hizo que todos se fueran y me dijo:

- ¿Te acordarás de mí?
- Claro abuelita.
- Yo te quiero, aunque nunca haya aprendido a decírtelo.

Pero sí que sabía decírmelo, aunque ella no lo supiera.

Y entre todos esos cuentos sobresalía el de "Perico el oso" que despellejó a alguien y dejó su piel en el colgador de la puerta. Era rudamente tierna. Y yo jugaba a hacerle rimas mientras ella sonreía.

Aquí tienes otra, abuelita:


La rosa quiere un jardín
que de espinas perfumado
haga del sol su aliado
y de la luna un jazmín.

La luna quiere un carmín
y con los labios pintados
quiere subir al collado
y bailar con su arlequín.

Quiere la luna ser rosa
y la rosa ser lucero
y el lucero mariposa
y la mariposa acero
y el acero ser babosa
y la babosa, aguacero.

miércoles, noviembre 19, 2008

Anteluego, desde allá

Pongamos en cada pierna un oficio
y en cada mano una desazón.
Leamos veinte libros descatalogados,
tres películas coreanas subtituladas,
y una vietnamita con sus papayas.
Oigamos a Satie, a Gorecki, a Part,
o a Reich, o a Brahem...
¿Y luego? ¿Y qué?

Construir desde la mente
-con trazos de deseo-
al persona amada sólo lleva a sombras,
y ya no tenemos fe en Platón.

Destilarte en vena mientras follábamos:
eso sí que era poesía.
Un poema carnal y sudoroso.
Y luego tierno, y lento, y suave con aristas
aborregadas, semiesféricas
-de las que dejan moratones
sin sangrar hacia afuera...
adentro, adentro, bien adentro-

Y sentir que las lágrimas se escapan
mientras sonreímos.

martes, noviembre 18, 2008

Desprendimiento

Desasirse, deshacerse
desvestirse, descentrarse
desmontarse, descreerse,
desarmarse, desnudarse,
despeinarse, deshojarse,
despellejarse, desasearse,
desosarse,desusarse,
desearse, despasarse,
desgrasarse, desasarse
desanarse, desgranarse
desandarse, desganarse,
desguarecerse, desprenderse,
deshabitarse, desaliñarse,
desgarrarse, despeinarse
describirse, despertarse
destrabarse


Desfarsarse



      Road to peace (Orphans: Brawlers, Bawlers & Bastards),   Tom Waits

sábado, noviembre 15, 2008

Cualquier Jueves

Hay algo oscuro que me lleva hacia el metro.
La luna –escorada- sobre las acacias
no sabe de nombres, tampoco sonríe.

Poco importa lo innecesario.
O, acaso, sea lo que más importe:
tal vez un beso girado en la esquina
-como ese abrazo cuando te despides-
sea la ceguera que nos permite vernos.

Quizá un año de estos
-un jueves cualquiera,
en una vida gastada hasta las raíces-
nos abra la puerta.

O sueñes con nada
vacía de manos.


      Astrakan cafe,   Anouar Brahem trío

viernes, noviembre 14, 2008

Soleá por tangos (según Pepe)

Ayyy, si entre los brazos de la cruz un dios se aterra,
ayyy, frente a tus ojos hay que morir.

Ayyy, que me han contao que en las tinieblas
ayyy, en tu sonrisa hay un candil.

Ayyy, que cuando llega la miseria,
hayy un corazón por desteñir.

Ayyy, que cuando sale la culebra
ayyy, sólo se puede sonreír.

Ayyy, que en mi tacto de piedra
ayyy, tu bien sabrás lo que bruñir.

Ayyy, porque antes de que me pierda
hayyy toda una luz por deslucir.

Ayyy, que por encima de la sierra
hayyy su silueta y tu perfil.

Ayyy, que por encima de la tierra
ayyy, quedan los rastros de un reptil.

Ayyyy, que las semillas y su siembra
ayyy, viven tan sólo en un desliz.

Ayyy, que cuando la puerta se cierra
ayyy, sólo se tiene que salir.

martes, noviembre 11, 2008

Hasta darte vuelta

Guardamos en el rescoldo del hoy
una corriente que fluye del pasado,
unos besos trasudados
en un enjambre de piernas y de brazos.

Me pierdo aquí,
aquí pervivo,
aquí comienzo en ti,
aquí me acabo
-pero continuo por tu espalda-

Persisto en tu nuca
-aquí muerdo un momento,
pero con los labios-
y al llegar a nuestras bocas
me salgo por la lengua
y entro en ti
hasta darte vuelta.

Ya estamos del revés
encajados como dos matrioskas
y hay que comenzar de nuevo,
entre sonrisas.


      E la nave va,   Anouar Brahem trío

Insurgencia

Acallado el plomo
queda la insolencia del que vence
y los cuerpos abatidos frente al alba.

Queda la humillación de los vencidos
en un campo de retama.
Quedan corazones asustados por su suerte,
queda desolación por los que faltan.

Pero si queda también quien nunca ceja,
un grano de fe que no se apaga,
los ganadores hablarán de terrorismo
cuando es sólo insurgencia firme y llana.

viernes, noviembre 07, 2008

Dibujos y fondos

La música bosqueja los estados de ánimo. Luego vienen las palabras que, inseguras, intentan plasmar los detalles. Más tarde se pierden, como se pierde un escrito al derramarse sobre él un tintero. Dejo caer las gotas y veo como se ahogan las palabras, como se mezclan con la uniformidad de fondo. Se desvanecen en negro y ya sólo queda en la memoria lo que no fue y ahora es apenas nada. El alcohol se encargará de limpiar los restos, de desgranar su recuerdo hasta el olvido. Se cierra el círculo como si nada hubiera sucedido. Sólo queda la sensación de que, por un momento, uno hizo algo bello.

Dicen que los círculos protegen del averno, dicen que sus demonios no pueden traspasarlos. Pero tus demonios parecen inmunes al conjuro, tus demonios traspasan todas mis fronteras, no entienden de mis límites porque son los tuyos, los que tú me marcas. Demoler límites crea nexos, teje el ciego cordón umbilical que me alimenta mientras me desgasta y las palabras gravitan ligeras sobre la irrealidad. Hasta que se pierden entre las gotas de tinta. Hasta que me pierdo.



      Fragmento del concierto en el teatro Södra de Estocolmo,   Anouar Brahem trío

jueves, noviembre 06, 2008

El origen del ahora

Se inserta en las piedras el tiempo y se deshace con el agua. Cada capa que se desprende son siglos de existencia que se filtra de nuevo hacia la tierra, vidas calcáreas que vuelven a su origen, que retornan a casa. El origen suele identificarse con la calma, por muy agitado que haya sido -como la explosión de una estrella- nada parece poder arrebatarle el atributo de paz que ingenuamente le otorgamos.

Solemos pensar que volver al principio cierra el círculo, que fuera de él queda el azar, lo contingente, pero lo cierto que fuera de él queda la vida, la sorpresa, el miedo, la tensión. Fuera de los círculos quedas tú, que no eres ni origen ni fin, tan sólo causa. El motivo que hace que el deseo me siga asiendo con férreo tesón a la vida, alejado de cualquier centro, transcendiendo todo origen, en la dulce levedad del momento más duradero: el ahora.

martes, noviembre 04, 2008

Creo en nada

Este es mi credo:
no creo en nada.

Bueno, sí,
creo en tu sonrisa bizca
y en tu mirada amplia;
también en tus repliegues
en los que me vuelvo agua.

Bueno, sí,
creo en tu palabra llana
y en el sabor de tus pezones;
también en la punta de tus dedos
que me peinan como garras.

Bueno, sí,
creo en tus silencios cómplices
y en tu gemir de amada;
también en el arqueo de tu espalda
y en el tacto de tus nalgas.

Bien pensado... creo en todo;
en lo que tiene importancia.



      Kokoro ni dakarete,   Yhosida brothers

lunes, noviembre 03, 2008

Instrucciones para oír esta canción

Luego antes contra desde.
Lugar y modo circunstanciales.
Yuxtapuestas sin yugo, conjuntivas dispersadas.
Valles en llanos, cumbres sin montañas.
Ríos sin cauce, velas sin viento -pero con llamas-.
Alpacas de madera, vicuñas destempladas.
Gaitas con gatillo, disparo en la culata.
Dispersión de policías, manifestación de soldadores.
Despertar de soñadores, un volcán de lava fría.

Una ventana mudéjar en una iglesia.
Una mezquita giratoria -los fieles en tiovivo-.
Una nube sin dios que la cabalgue.
Un rey de bastos con palillo.
Un ángel con pluma y sin espada.
Un confín que se quedó en casa.
Un sinfín que ha terminado.
Una concentración de distraídos.
Un adiós recién vencido.



De todo esto, hacer una amalgama.




      Faileas Air An Airigh,   Runrig

sábado, noviembre 01, 2008

Danza ritual, mestiza e impura

Hay preguntas que carecen de sentido pero, en el sin sentido, uno se aferra a las palabras intentando encontrar una clave oculta. A menudo, hay demasiadas palabras en cada palabra, lo que las vuelve sanadoras o nocivas para el sentido secreto de las cosas según la percepción emocional de quien las lee.

Las palabras que intentan suplir a las caricias siempre están condenadas a ser meras sombras de una realidad epidérmica, absoluta y contenida en el fugaz instante del abrazo que activa y potencia a todo el resto de sentidos. Cuando se abraza a quien se ama subyace siempre el intento de convertirse en un ser bicéfalo.


Basta de palabras ¿Bailamos?


      Danza ritual,   Uxía