martes, noviembre 04, 2008

Creo en nada

Este es mi credo:
no creo en nada.

Bueno, sí,
creo en tu sonrisa bizca
y en tu mirada amplia;
también en tus repliegues
en los que me vuelvo agua.

Bueno, sí,
creo en tu palabra llana
y en el sabor de tus pezones;
también en la punta de tus dedos
que me peinan como garras.

Bueno, sí,
creo en tus silencios cómplices
y en tu gemir de amada;
también en el arqueo de tu espalda
y en el tacto de tus nalgas.

Bien pensado... creo en todo;
en lo que tiene importancia.



      Kokoro ni dakarete,   Yhosida brothers

6 Comments:

Blogger La paciente nº 24 dijo...

Del otro lado de los credos, en la incredulidad relegada por las religiones; allí donde nos acariciamos, se despoja el dogmatismo de lo más cotidiano, la precisión total de una creencia; en un solo movimiento de manos.

4/11/08, 18:24  
Blogger UMA dijo...

Buen credo, Carz.
No crees que es muy bueno de vez en cuando asirse a esas convicciones?
A mi me parecen tan plenas y bellas, que dan envidia...
Quien peinò con ternura tus penas comparte sin duda ese credo, con los ojos limpios, con la mirada llena.
Muy emotivo.

"El uno total menos
plenicorrupto nones consentido apenas por el cero
que al ido tiempo torna con sus catervas súcubos sexuales y su fauna de olvido

El uno yo subánima
aunque insepulto intacto bajo sus multicriptas con trasfondos de arcadas
que auto nutre sus ecos de sumo experto en nada
mientras crece en abismo

El uno solo en uno
res de azar que se orea ante la noche en busca de sus límites perros
y tornasol lamido por innúmeros podres se interllaga lo oscuro de su yo todo uno
crucipendiente sólo de sí mismo."


Un abrazo que lanza el pasado al vacìo cual bumerang:)

4/11/08, 21:17  
Blogger UMA dijo...

Es Oliverio, claro està:)

4/11/08, 21:20  
Blogger ybris dijo...

Llamamos nada a menudo a lo que es todo.
Y llamamos poco importante a lo que es muy importante.
Por eso acabamos creyendo siempre en todo lo que merece la pena.

Un abrazo.

5/11/08, 7:49  
Blogger Ego dijo...

Yo también creo en todo. En amapolas parlantes y en censuras antes de que se inventase la escritura. En todo. Hasta en 'El juego de tu vida'.
Un abrazo

6/11/08, 1:36  
Blogger Luzamarga dijo...

Creemos.

De crear, de crearnos. Involucrarnos hasta deshacernos en los límites de lo intangible y renovarnos de esa materia emocional en la que los dioses no saben creer ni pueden alcanzar.

Amar, creyéndonos, creándonos, porque lo demás poco importa.

(¿Cómo se podrá alargar un beso hasta tu sombra cuando escribes?)

6/11/08, 2:02  

Publicar un comentario

<< Home