lunes, abril 26, 2010

De Trachimbroda a San Petersburgo

Sin verte
te he vivido recorriendo girasoles,
escondiendo recuerdos en estantes,
en promesas polvorientas en los libros.

Tendrá que haber
-si así lo quieres-
vida en una caja de zapatos
oculta en la esquina más inverosímil de los tiempos:
de legado deja soledades
y dolor de sangre ofuscada
que no sabrá jamás llegar al río.



Embers, Max Richter.
Para descargar la canción
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Carta de Eugene Onegin a Tatyana Larin

Puedo ver el amargo desprecio engulléndome en llamas desde tus orgullosos ojos cuando hayas leído mi secreto dolor. Cuando nos conocimos, vi, por un momento, la ternura como una estrella fugaz. Pero no me atreví a poner mi fe en ella. Después murió Lensky, lo que nos separó aún más. Luego arrebaté a mi corazón todo lo que le era querido, desarraigado... enajenado de todo aquello a lo que la libertad y la paz sirven a cambio de la felicidad. ¡Dios, qué errado estaba! ¡Cómo he sido castigado! No. Día a día estar contigo, seguirte a todas partes...vivo, a cada sonrisa tuya, a cada movimiento de tus ojos, morar en la perfección de tu alma, escuchar tu voz deshacerse en halagos...Eso es felicidad. Y a mí me ha sido negada. Breve es mi tiempo. Cada día y hora, preciosos. Y yo me ahogo en sombría soledad. Cada día será un desierto, hasta ese día en el que me despierte y sepa que me traerá un rayo de ti. ¡Ay, si vieras las llamas que arden en mi interior! Esas que yo intento sofocar con mi razón. Pero sea así. Ya no puedo seguir luchando contra mis sentimientos. Estoy enteramente a tu voluntad.
Eugene.

3 Comments:

Blogger ybris dijo...

Impresionantes las cartas de Eugene Oneguin.
Hay presencias distantes vívidas que habitan las más raras esquinas de los tiempos.
Saben a soledad tantas veces...

Un abrazo

26/4/10, 4:46  
Blogger UMA dijo...

Cuánta potencia en las palabras, en las tuyas, en las de Eugene.
Es que acaso la felicidad no son aquellos pequeños instantes fragantes? Si, eso es felicidad, y por fortuna, no se ha perdido en la piel de la memoria.
Bello, como siempre.
Un besazo

26/4/10, 19:10  
Blogger gaia07 dijo...

Y si alguna vez la abrieras descubrirías que ni siquiera una lágrima le enseñará el camino.

Me estoy cansando de mandarte abrazos. Detén el paso alguna vez.

28/4/10, 9:11  

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