No todo fue naufragio
He vuelto a pasear por Malasaña. Intentaba adivinarte pero me ha resultado difícil. Al final, he tenido que cerrar los ojos como quien abre un cofre, he tenido que traspasar el tiempo y todo su océano, y llegar a nado hasta tus costas, exhausto y casi amnésico. Tu me has recogido en la playa como quien encuentra parte de sí mismo, y me has metido en ti. Luego, has sonreído.
Padmakara, Choying Drolma & Steve Tibbetts.
Para descargar la canción pulsad aquí con el botón derecho.
Padmakara, Choying Drolma & Steve Tibbetts.
Para descargar la canción pulsad aquí con el botón derecho.
9 Comments:
Bellísimas palabras.
Gracias por compartirlas.
In
No existe la casualidad, decíamos.
Encontrar de esa forma una parte de uno mismo espero siempre regale una sonrisa y reconforte.
Adivino que vos también sonreíste.
Mi abrazo completo.
A-brazada(s) llegas amnésico; olvidar mejor construyendo recuerdos, se puede ver por debajo de los párpados, como en los sueños. Se apagan las horas, es fácil hacerlo con esos parpadeos, con labios de esparto y garganta de cuero. Recoger en la orilla lo que ha caído del cofre abierto; un trozo de labio, un pedazo de cuello…Sonreír.
Grandes palabras. Un gusto leerte.
Se te clava en el alma una imagen imborrable que sin embargo no puedes precisar del todo. Se te aloja en tus mañanas y te roe los párpados.
Quizás exhausto y amnésico sea el único modo.
Quizás olvidándose de uno mismo, el dolor desaparezca y su sonrisa te recogerá para no dejarte morir en la rompiente.
Malasaña tiene ese poder, cuando ya la has pasado, solo queda sonreír.
Otro abrazo.
Está la imaginación.
Está el traspaso del tiempo con su océano.
Está la llegada y el abrazo.
Desde luego, lo de menos es el naufragio.
Abrazos.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
"../Cuando sepas hallar una sonrisa....
Sentirás en la inmensa muchedumbre
de seres y de cosas tu ser mismo;
serás todo pavor con el abismo
y serás todo orgullo con la cumbre...."
E.Gonzales Martinez
Lindo verte sonreir : )
"Y cuando todo el mundo se iba
y nos quedábamos los dos
entre vasos vacíos y ceniceros sucios,
qué hermoso era saber que estabas
ahí como un remanso,
sola conmigo al borde de la noche,
y que durabas, eras más que el tiempo,
eras la que no se iba
porque una misma almohada
y una misma tibieza
iba a llamarnos otra vez
a despertar al nuevo día,
juntos, riendo, despeinados."
Nada...que lo leo y nos recuerdo,
como recuerdo ese poema escrito en el baño de un bar bullicioso.
Un beso y mi abrazo, claro.
Publicar un comentario
<< Home