miércoles, enero 28, 2009

De lucidez y ceguera

En esta lucidez tardía
que emerge del sueño, la enfermedad y el cansancio,
sé que extrañaos es imprescindible
para reconocerme en mis cimientos
que –algún día-
tendrán sentido en la ceniza.
La ventana golpea a la lluvia por sorpresa
y atraviesan vuestras astillas
los violentos soportales de esta plaza
contenidos por un muro de agua casi blanca
como la ceguera lechosa de Saramago
o esta elegía de Shostakovich.

Desde esta lucidez hiriente
que me despoja de mi sentir de niño
y me arranca del dolor para alejarme,
no puedo evitar convocar a esta sonrisa
desde aquellos tiempos de la infancia
en los que no me atreví a soñar siquiera
en amar y ser amado
con la hondura, la firmeza y la locura
que habéis dilapidado en mi persona.

En esta lucidez inoportuna
no puedo más que celebrar lo que he ganado,
aprehender y prender lo que he perdido,
desprenderme del resquemor, la pesadumbre, del odio…
hasta del que me he tenido a mí mismo.





Sting quartet Nº 15, Op. 144, primer movimiento Elegía (Adagio) (fragmento), Dmitri Shostakovich
Para descargar la canción, pulsad aquí con el botón derecho.

7 Comments:

Blogger ybris dijo...

Escucho a Shostakovich.
Silencio.
Más luz que sombra.
Más lucidez que ceguera.
Bien puedes celebrar lo ganado.

Un abrazote.

28/1/09, 8:03  
Blogger AnadelasTejasrojas dijo...

...'no puedo más que celebrar lo que he ganado'

28/1/09, 17:20  
Anonymous Anónimo dijo...

me dejaste conmovida.. muy bello. Mis buenos deseos y mejoria.

... y un gran abrazo.

28/1/09, 19:07  
Blogger Luzamarga dijo...

Hay una bella honestidad en estos versos. Y hay amor, mucho y del bueno. Justo es que lo celebres y punto (lo perdido y lo ganado, ese equilibrio dinámico de las tensiones de la vida),y porque se te ama en cualquier caso.

(Que también la lucidez sea transitoria...=D)

Mis besos(hondos, firmes, locos).

29/1/09, 0:07  
Blogger Ego dijo...

Yo escucho a Calamaro. Sólo una vez por semana.
Un (b)eso desde el sonitono

29/1/09, 0:57  
Blogger gaia07 dijo...

Bailarina dulce y sinuosa en el movimiento de Shostakovich, cautivada por la pantalla en las emociones de palabras, el sentido de las frases, con ademanes de ensueño por saber que nos quieres y te queremos.
Ahí la dejo, entre los párrafos, sin más preparación para su baile que el sentimiento de cada sonido y cada letra en cada instante.

29/1/09, 22:36  
Anonymous Anónimo dijo...

Escuchando -el otro día- a Jordi Savall, disfrutando de la música que toca y de cómo la explica y siente...pensé: es hermoso, igual que este pensamiento tuyo del post.
Shostakovich también; me encanta el sonido de la viola -más la de brazo-, a pesar de que prefiero las melodías menos disonantes y más "principio físico armónico", con sus frases musicales rítmicas y medidas, su peso, su equilibrio...música decantada.
Debe ser cosa de carácter (¿antiguo?) jeje.
Besos

30/1/09, 21:30  

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