En los momentos de desamparo, cuando la realidad se convierte en pesadilla, todos buscamos motivos racionales para sobrellevarla, pero raramente se encuentran. Por ello, cualquier acto que nos procure la sensación de que nuestra angustia está justificada y consiga sublimarla es lícito.
Aunque sea ilusorio.
Aunque sea nada
En realidad lamentaría no leer lo que casi no he escrito.
Textos y fotografías originales de
Carz
4 Comments:
Sabias contraindicaciones.
Ojalá se pudiera no concentrar la vida en los instantes.
Abrazos.
Concentrar la vida en el sí.
Extraer la esencia pura del instante.
Bebérsela.
Despertar con la fe subida a lomos de lo que se espera.
Una belleza, como siempre.
Mi admiración y mis besos.
Lo pegaré en el frigo.
(Un beso)
Curiosa esta aplicación del concepto de fe...
Gran blog.Saludos!
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