sábado, septiembre 09, 2006

Homo sum, humani nihil a me alienum puto (*)

Paseo por mi interior
-páramo en llamas
poblado de gigantes camuflados de molinos-
y no hallo sino la fuerza del vencido
devorado por los perros,
fuerza vital e incombustible
del que todo lo ha perdido,
del que no espera nada que no consiga por su pulso:
ni regalo, ni dádiva, ni caridad o pernada.

Situado al otro lado del orgullo
mantengo intacta mi dignidad de humano.


(*)sentencia de Publio Terencio Varrón

12 Comments:

Blogger Natinat dijo...

Gracias por leerme y dejar huella de tu visita, interesante tu punto de vista, coincido contigo en algunos puntos.

Me quede con esta frase de tu comentario: No hay más dios que el hombre y por fortuna acabará extinguido.

¡Dios te oíga amigo... dios te oíga!!

amén y amén

Natinat

9/9/06, 5:48  
Blogger Simplemente Olimpia. dijo...

Llevo días leyendote, pero hoy me permito el lujo de escribirte. NO diré nada sagaz ni ingenioso, hoy no quiero "pecar" de nada, simplemente comunicarte, que con/sin tu venía te acompaño y que mi "fe" está salvaguardada.
NO espero que me entiendas, sino que "yo" haya sabido explicarme, confió en tus habilidades y a veces no en las mías.
Olimpia.

9/9/06, 14:09  
Blogger quantum dijo...

Sacar fuerza de la derrota requiere quizá mayor coraje que vencer. Y, generalmente, la derrota del hombre reflexivo le hace alcanzar a éste una lucidez que, aun lejos de serle placentera, arraiga su dignidad.

Un saludo.

9/9/06, 16:44  
Blogger UMA dijo...

Tras la sentencia de Publio Terencio Varròn, leo por debajo algunas cosas que me he dicho alguna vez, ninguna carga es tan pesada que no pueda ser sobrellevada, y cuando digo esto pienso en tus palabras, en tu sobrevivir de hace un tiempo, y yo te regalo un vivir por sobre la realidad.
(Recordamos a mi abuela, claro, irremediablemte y sentenciamos, 'dios nos dio el diente, dios nos darà el pan')
Dicho està que nada hay que uno no pueda conseguir sino es por propias manos, el destino que no ha sido marcado, hacedores, digo yo, dignos de nosotros mismos, para poder mirarnos al espejo cada dìa, yo le llamo a eso no rendir cuentas a nadie salvo a uno mismo.

Los hechos y las personas que atraemos hacia nosotros son necesarios para aprender lo que necesitamos.
Aprovechalo, Carz.

Fortes fortuna adiuvat
Mi abrazo, que lo tienes.

9/9/06, 17:31  
Blogger Carz dijo...

Hola Natinat,

Quiero disculparme por el tono innecesariamente bronco de mi comentario en tu blog. Sólo puedo alegar que tuve un mal día, una excusa muy leve, pero no tengo otra.
Dicho esto, te agradezco la cortesía que usas al comentarme: parece fiel reflejo de lo que cuentas en tus artículos y, aunque puedo coincidir en el fondo en muchos casos, no creo que sea necesario el salto “metafísico” que a menudo empleas. En ese sentido soy partidario de la navaja de Ockham, uno puede hacer todo lo que considera bueno simplemente por el imperativo categórico kantiano sin necesidad de creer en un orden o ente superior, es más, en ese caso tiene un valor añadido porque no espera otra recompensa que la de tener su conciencia tranquila, ningún otro criterio lo juzga y, por tanto, ni lo castiga ni premia. Identificar el ateísmo con la maldad, me parece tendencioso y etimológicamente incorrecto.
En cualquier caso te considero una persona ultraidealista y me reconfortaría mucho que tu premio en vida no fuera el fracaso. Una vez muerta, ya sabes, en dos generaciones tendrás a los “hombres trepadores” ocupando los cargos de decisión de lo que tú lograste con idealismo y esfuerzo.

No sé, igual, además de teorizar, pones en práctica lo que postulas como cooperante en Nicaragua.

Saludos y buena suerte.

11/9/06, 1:38  
Blogger Carz dijo...

Olimpia,

Yo tampoco diré nada sagaz ni ingenioso: sólo diré que creo que has conseguido explicarte y que leer tu comentario ha sido una alegría en unos días difíciles.

Gracias

11/9/06, 1:44  
Blogger Carz dijo...

Quantum,

Una vez más discrepo contigo: sacar fuerzas de la derrota es el deber ineludible del derrotado. Lo que necesita coraje es vencer a alguien, pues eso supone imponer tu voluntad sobre la del otro usando alguna ventaja que posees (fuerza física, psicológica, habilidad con la espada o la pistola, etc)

Y cambio 49 (siete veces siete) moles de lucidez por 1 mol de felicidad en estado bruto, de esa que logra la enajenación mental y se contenta con la comunión.

Espero que sepas de lo que hablo.

11/9/06, 1:57  
Blogger Carz dijo...

Uma,

Nuestro lenguaje nunca ha sido verbal: la civilización es algo que a ti y a mí nos separa. Nos une algo mucho esencial, algo que brota de la primera rama del árbol de la vida y que nuestros miedos se empeñana en cercenar.

A veces pienso que Eva y Adán pecaron por miedo al paraiso.

Ya sabés, sólo tenés que decir ... y ya.

11/9/06, 2:05  
Blogger quantum dijo...

No creo que sacar fuerza de la derrota sea un deber en absoluto. Unos la sacan y otros no. Y tampoco creo que vencer sea necesariamente cuestión de coraje, aunque a veces lo sea. Desde luego, vencer no requiere en principio tener más coraje que el adversario vencido. Si fuera así, siempre ganarían los más valientes y la historia es otra. La fuerza y la habilidad no son sinónimo de coraje, y mucho menos la astucia, elemento por el que muchas veces se vence.
En cuanto a lo segundo, lo de que cambias la lucidez...pues claro que sí, yo también lo haría, no es tan difícil saber de lo que hablas.

11/9/06, 2:28  
Blogger Carz dijo...

Quantum,

Diría que no has entendido de lo que hablo, o sea, que no he sabido explicarme :-)

No me refiero al hecho de vencer, que puede ser fortuito, sino al “deseo de vencer”. No me gustan las competiciones porque no me gusta ni perder ni ganar. Hablo de competiciones no impersonales, cuando se ve y se conoce al que se tiene enfrente. A menudo prefiero dejarme perder si con ello voy a provocar una satisfacción en alguien que aprecio (no leas esto con segunda intención ¿ok?). El ganar a “alguien” en general, me resulta incómodo, me resulta incómodo incomodar, por eso necesito coraje para vencer a alguien… espero que esta vez sí me haya explicado.

Y en cuanto a lo segundo, el “Espero” que enuncié no era una duda, sino un deseo que estaba casi convencido que se cumpliría.

Espero no haberte incomodado (y este “espero” es también un deseo que sé que estará cumplido :-))

PD.- Espero no haber usado mal los emoticones, y de esto no estoy nada seguro ;-)

11/9/06, 2:56  
Blogger ybris dijo...

Ojalá todos sintieran como tú que nada de lo humano nos es ajeno.
Para eso es necesario saber descubrir la dignidad que nos alienta internamente cuando nos miramos por dentro.
Y estar convencidos de que a todos los demás les pasa igual.

Un abrazo.

11/9/06, 3:29  
Blogger Carz dijo...

Ybris,

No creo que sea necesario pensar que a los demás les sucede lo mismo. Yo soy una persona que cree en el imperativo categórico kantiano, procuro actuar buscando la tranquilidad de conciencia, aunque no siempre lo consigo, por desgracia.

Un abrazo

12/9/06, 1:34  

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