Garra
Incómoda la esperanza
poco a poco
se adueña de la tarde
que se adentra en la ventana
con su perfil de sombras.
Aunque sé que es posible
atravesar la luz
sin dejar rastro,
hoy me fijo en mi dureza
-también la observo-
como una garra
se ancla en el cemento.
poco a poco
se adueña de la tarde
que se adentra en la ventana
con su perfil de sombras.
Aunque sé que es posible
atravesar la luz
sin dejar rastro,
hoy me fijo en mi dureza
-también la observo-
como una garra
se ancla en el cemento.
enviado por Carz 4:20 p. m.
3 Comments:
Hoy engancho en el cemento
al Sol que no me da vida,
al niño que me amenaza,
al hombre que me contempla.
Si es cuestión de elegir, ¿por qué hacerles caso?
Un (b)eso...
Incómoda, pero consoladora.
No importa nuestra dureza de garras ancladas en el cemento.
La esperanza las hace libres para recogerlas durante el vuelo.
Abrazos.
y yo que pensaba que la esperanza venía con perfil de luces.
Jo, carz, me varías los esquemas! jejje.
Yo quiero una dureza de esas. Hoy, al menos.
Un beso
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